¿Sexta ola del coronavirus? ¿Hay motivos de preocupación?

«Es realmente complicado que pueda existir una sexta ola rápida, aunque sí puede haber brotes». Fueron palabras de Fernando Simón hace un par de semanas cuando le preguntaron por la posibilidad de sufrir una nueva oleada del coronavirus en nuestro país. Por definición, realmente complicado es algo que, aunque difícil, puede ocurrir. De hecho, este virus ya ha demostrado en repetidas ocasiones que es absolutamente imprevisible. Así que, ¿podría haber en España una sexta ola del coronavirus?

La realidad es que los expertos en epidemiología afirman que el virus está en una fase de riesgo bajo, pero no de riesgo nulo. El propio Simón, en la misma comparecencia en la que pronunció las palabras con la que comienza el artículo mencionó la posibilidad de que esa sexta ola exista, aunque sería, en todo caso, «menos pronunciada y más lenta» que las anteriores. La clave ahora es no ser demasiado optimista y no bajar la guardia, algo que solo supondría vía libre para el virus.

Verano largo y alta vacunación

El extenso verano que estamos teniendo en cuanto a las temperaturas, aunque ya estemos en pleno otoño, ayuda al control del virus. Pero el frío está ya a la vuelta de la esquina y eso siempre complica los virus de tipo respiratorio. No solo el coronavirus aumentará su peligro en las próximas semanas, también virus como el de la gripe crecerá conforme vayan bajando las temperaturas.

La diferencia con el otoño y el invierno pasado es que ahora el índice de vacunación de la población española es uno de los más altos de Europa y del mundo. Más del 85% de la población española mayor de 12 años está vacunada ya con la pauta completa. Algunos grupos poblacionales, incluso con la tercera dosis según la vacuna que les fuera administrada. Eso, sin duda, ayuda a que el temor por la expansión del virus se vea reducido.

Ejemplo en Europa

España es ejemplo de gestión en algunos aspectos del coronavirus. Es cierto que fuimos uno de los países más afectados en los primeros meses de la pandemia. El verano de 2020, con muchas de las fronteras abiertas, tampoco ayudó a controlar la expansión de la pandemia en nuestro territorio. Los números mostraban una ola detrás de otra en la que España casi siempre era uno de los países con las gráficas más pronunciadas.

No obstante, con la llegada de la vacuna todo cambió y nuestro país comenzó a ser uno de los que mejores estadísticas presentaba. Desde comienzos de este 2021, y con la campaña de vacunación en velocidad de crucero, España es, junto a Portugal, Malta e Islandia, uno de los países que presenta un índice de vacunación más alto. Casi el 80% de los españoles ya tienen la vacuna puesta por el 67% de los italianos o el 65% de los franceses o los británicos (datos del Centro de Documentación Europea).

Reino Unido y Letonia, en problemas

Precisamente Reino Unido está sufriendo en las últimas semanas un repunte de casos que hace preocupar a los expertos locales. Los registros rondan los 50.000 casos diarios de infección y unas tasas de hospitalización y muertes que son las más altas de Europa. En la última semana, más de 900 personas han perdido la vida en las islas británicas a causa del Covid-19. Allí, sin duda, la sexta ola del coronavirus está más que presente.

Sin embargo, el presidente Boris Johnson ignora por completo las recomendaciones de la comunidad médica de su país. El siempre controvertido mandatario británico no quiere regresar al confinamiento, toques de queda y demás restricciones sanitarias. De hecho, recuperar la economía es el objetivo que se ha marcado y no va a volver a imponer medidas restrictivas, a no ser que la situación vuelva a ser insostenible, como en los primeros meses de la pandemia.

En el lado opuesto está Letonia. La república báltica, por su parte, ha ordenado el confinamiento total con duración de un mes. El bajo índice de vacunación en el país letón, con apenas un 50% de población vacunada, ha hecho que la variante Delta del virus se extienda rápidamente. Además, han aplicado un toque de queda estricto para frenar su curva, que tiene una pendiente pronunciadísima en los últimos días.

Sea como sea, lo que está claro es que España está en una situación mucho mejor que la de varios sus vecinos europeos. Esto no significa que la situación se haya superado por completo, ni que se pueda levantar toda la precaución. Precisamente, ser precavidos y seguir cumpliendo las pocas medidas existentes y continuar con el ritmo de vacunación es lo que hará que los número sigan su buen cauce.