El auxiliado es un varón de 27 años y nacionalidad española que había decidido acabar con su vida debido a problemas personales
Agentes de la Policía Nacional han llevado a cabo un auxilio humanitario en el que los policías consiguieron impedir in extremis que un ciudadano de 27 años saltara al vacío desde un puente ferroviario abandonado con una altura de más de 30 metros, hecho este que hubiera acabado con su vida de forma irremediable. Los agentes lograron agarrar a esta persona, sacarla del puente y llevarla hasta un lugar seguro, siendo calmado y trasladado a continuación hasta un centro hospitalario.
Ideas autolíticas
En torno a las doce y veinte de la mañana se recibió una llamada en el CIMACC-091 en la que una mujer informaba que su expareja le había enviado una foto de una sola visualización, momentos antes, en la que aparecía sobre un puente de hierro con vigas de madera, junto con un mensaje que anunciaba su decisión de quitarse la vida.
A partir de esta exigua información los agentes intentaron averiguar la ubicación exacta del puente, determinando que posiblemente se tratase de un viejo puente perteneciente a la vía férrea en desuso que unía Guadix con la localidad de Almendricos. Esta se encontraba en una pedanía del municipio de Baza denominada El Baúl. Para confirmar esta hipótesis los agentes recurrieron a un policía jubilado que vive en las inmediaciones de dicho puente. Puestos en contacto con el mismo, vía telefónica, el agente retirado les confirmó la presencia de un varón en mitad de dicho puente y sobre su filo, el cual presentaba una actitud muy nerviosa, levantándose y asomándose al borde de manera repetitiva.
Agarrada in extremis
Sin perder un minuto, una dotación policial se desplazó con celeridad hasta el lugar indicado, localizando los agentes a la víctima en el centro del puente ferroviario abandonado. El varón se encontraba en el medio del puente y en su filo, con la intención de precipitarse al vacío desde allí. Nada más salir del vehículo, corrieron hasta su posición, consiguiendo agarrarlo in extremis y evitar una caída que hubiera acabado inexorablemente con su vida.
A continuación, la víctima fue sacada del puente y alejada del peligro por los agentes, trasladándola hasta un lugar seguro, momento en el que la víctima manifestó que debido a una serie de problemas personales no deseaba seguir viviendo. Una vez calmado, los agentes trasladaron a esta persona hasta un centro hospitalario donde fue atendido.
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