El ocio nocturno tendrá importantes limitaciones en Andalucía para evitar la propagación del coronavirus. Juanma Moreno ya había anunciado a los alcaldes de las 8 capitales andaluzas que se catalogaría al botellón de «actividad insalubre, nociva y peligrosa». El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha adoptado otra serie de medidas que entrarán en vigor de manera inmediata.
«Los establecimientos de esparcimiento cerrado tendrán un aforo que no podrá superar el 40% en mesas o agrupaciones de mesas». Las personas deberán estar sentadas y el número máximo permitido es de 12 por grupo. Además, se prohibe la venta y consumo en las barras, debiendo acompañar a las mesas a los asistentes que incluso podrían firmar un documento de que se le han explicado todas las normas a seguir.
A la entrada del establecimiento, deberán desinfectarse las manos con gel hidroalcohólico, tomarse la temperatura e identificarse para que sea sencilla su localización en caso de rastreo. La local se cerrará antes de las 5 de la madrugada, impidiendo su acceso desde media hora antes. También se debe contar con controladores de salas que vigilen que se cumplen las normas y que se limpia como máximo a cada hora.
Las terrazas al aire libre de estos negocios tendrán un aforo máximo del 75% con una ocupación de 12 personas como mucho por grupo. Respecto a los pub, el aforo no sobrepasará el 60%. Se prohíbe el uso compartido de cachimbas o pipas de agua. Mientras que en los negocios de hostelería de autoservicio, se evitará la manipulación directa de los productos por parte de los clientes. «Los establecimientos de hostelería no podrán superar el 75% de aforo máximo para consumo en el interior del local y la ocupación máxima será de 12 personas por mesa o agrupación de mesa».
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