Foto: Junta de Andalucía
La Junta de Andalucía ha acotado la crisis sanitaria provocada por el programa de cribado de cáncer de mama al determinar que el 90% de los diagnósticos no concluyentes se concentran en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. En total, se trata de 1.800 mujeres cuyas pruebas no ofrecieron resultados claros y con las que el Servicio Andaluz de Salud está contactando de forma individual para revisar su situación.
Para dar respuesta urgente a este problema, el Gobierno andaluz ha aprobado un plan de choque con una inversión de 12 millones de euros, que se centrará de forma prioritaria en este hospital sevillano, el de mayor volumen de pruebas de toda Andalucía. El objetivo es que todas las pacientes tengan un diagnóstico definitivo antes del 30 de noviembre.
Refuerzo sanitario con recursos públicos
La consejera portavoz, Carolina España, explicó que este plan se ejecutará con recursos 100% públicos, sin recurrir a conciertos con clínicas privadas.
Por un lado, se abonarán horas extra y actividad extraordinaria en fines de semana para incrementar la capacidad de atención de las unidades de mama.
Por otro, se reforzará la plantilla con 119 nuevos profesionales sanitarios, entre ellos 65 especialistas en radiodiagnóstico, 20 enfermeras y 34 técnicos, para agilizar las pruebas pendientes.
Cambios en el protocolo de comunicación
La Junta también ha modificado el protocolo de cribado, que databa de 2011 y no fijaba plazos obligatorios para informar a las mujeres con resultados no concluyentes.
A partir de ahora, el personal sanitario está obligado a comunicar de forma inmediata cualquier resultado indeterminado, tanto verbalmente como por instrucción escrita, para evitar retrasos y garantizar la transparencia con las pacientes.
Responsabilidades pendientes
Aunque la prioridad actual es resolver la crisis asistencial, la Junta ha anunciado que una vez estabilizada la situación se investigarán las causas y se depurarán responsabilidades.
La consejera de Salud, Rocío Hernández, se ha apartado de las comparecencias públicas y trabaja directamente con su equipo en el Virgen del Rocío para coordinar el operativo.
Con este plan de choque, la Junta pretende dar respuesta a una de las crisis sanitarias más relevantes de los últimos años, restablecer la confianza en el sistema de cribado y asegurar que todas las mujeres afectadas reciban una atención rápida y adecuada.

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