Foto: Antonio Baena
Los aficionados al flamenco tuvieron en la noche del sábado una cita ya tradicional en Granada con la celebración del XLIV Festival Flamenco del Zaidín.
El veterano festival volvió un año más con un cartel de artistas y cantaores de primer nivel dispuestos a deleitar al público que completó el aforo del Auditorio «José Fernández de Castro».
Abría la noche el conocido bailaor Agustín Barajas, arropado por la guitarra de Marcos Palometas y el cante de Manuel y Fita Heredia.
El cante de Iván Centenillo le dio el relevo sobre las tablas. Acompañado por el guitarrista Ramón del Paso, conectó rápidamente con el público, que lo premió con las primeras ovaciones de la noche. Además de cantar, hizo las veces de presentador durante el resto de la noche, y ensalzó y reivindico la figura de su desaparecido amigo y guitarrista zaidinero Armando Linares, al que dedicó su actuación.
La tercera flamenca en ponerse ante el micrófono fue Judit Urbano, con una original apuesta musical para la que se acompañó de la familia del Paso, Ramón a la guitarra y su hija Elisa a la viola.
Desde Almuñécar llegó María Gómez «La Canastera», acompañada por Niño Carmelo a la guitarra, para mostrar todo su poderío artístico. El público animó a la cantaora y ella se dejó querer en todo momento.
Para el final de la noche, tras el baile de nuevo de Agustín Barajas, la voz de José Fernández, que se acompañó de la guitarra de su hijo Jose para rubricar una excelente actuación.
Marian Fernández y el guitarrista albaicinero Marcos Palometas pusieron el punto y final a una velada que dio la oportunidad a los asistentes de disfrutar del flamenco más granadino.
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