Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada a un varón de 56 años de edad con antecedentes policiales como presunto autor de mantener ilegalmente a su compañera de piso en el interior del mismo contra su voluntad. Además de haberle propinado un golpe en la cara y arrebatarle su teléfono móvil para impedirle narrar a los agentes su situación, después de que ésta realizara una llamada al CIMACC-091.
El domicilio está situado en la zona de la Bola de Oro, desde donde, alrededor de las 9;30 horas, la víctima realizó una llamada al CIMACC-091 que se entrecortaba y apenas era audible, apreciando claramente los agentes que alguien estaba intentando impedir que se mantuviera el contacto telefónico.
No obstante y pese a estos intentos, los policías pudieron escuchar el lugar del suceso, por lo que, con la inmediatez requerida por la situación, comisionaron a una dotación policial para que comprobase lo que estaba ocurriendo y actuase en consecuencia.
Una vez en el lugar, los policías escucharon gritos de auxilio que provenían del interior de una vivienda, a cuyo timbre llamaron con insistencia sin obtener resultado, a pesar de haberse identificado como policías. Cuando se disponían a apalancar la puerta del inmueble, repentinamente salió una mujer que se refugió en ellos. Detrás de ella salió un varón que fue detenido y trasladado a dependencias policiales.
Según el relato ofrecido por la mujer, la misma residía en el domicilio del varón desde unas semanas antes, siendo la relación que les une solamente como amigos. Al parecer el incidente se había iniciado la noche anterior, cuando la víctima se dispuso a salir y su compañero de piso se lo impidió, el cual, además de decirle que no se marchaba, le habría propinado un golpe en el rostro después de mantener una fuerte discusión.
A la mañana siguiente la perjudicada volvió a intentar salir del domicilio y nuevamente le fue impedido, por lo que se dispuso a realizar la llamada a la Policía Nacional. En ese momento él había reaccionado de forma muy agresiva y le habría impedido hacerla al mismo tiempo que le quitaba el teléfono.
Poco después, tras la insistencia de los agentes en el sentido de que abriera, le devolvió el teléfono y, en un momento de descuido, la mujer pudo dirigirse hacia la puerta y abrirla, corriendo a refugiarse al amparo de los policías, quienes también detuvieron al varón. El detenido ya ha pasado a disposición de la autoridad judicial mientras la mujer no ha sufrido lesiones físicas de importancia.
Más historias
La Policía Nacional detiene a un joven por quemar contenedores y un vehículo
Desarticulada una organización dedicada a reclutar a menores suecos y daneses
La Policía Nacional ha detenido al presunto autor de unas amenazas con un cuchillo a la propietaria del piso donde reside