La ola de calor que a mediados de agosto afectó a la provincia de Granada llegando a temperaturas de hasta 45 grados y declarándose el nivel de alerta roja, ha pasado factura al césped del estadio de Los Cármenes. Ya en el partido ante el Valencia CF se podían apreciar algunas zonas con ‘calvas’, y un terreno de juego muy pesado.
Desde el club, los operarios están trabajando para recuperar el mejor estado posible del ‘verde’ del coliseo rojiblanco. Tienen tiempo de sobra para ello, teniendo en cuenta que el próximo partido del Granada como local será el domingo 12 de septiembre a las nueve de la noche ante el Real Betis Balompié.
El club y LaLiga buscan un estado óptimo del césped que a priori se traduciría en un mayor espectáculo, además de evitar riesgos de lesiones. Durante la presentación de Rubén Rochina ya se pudo apreciar el trabajo de los jardineros del Granada, con bastantes zonas que se están levantando para revitalizar el césped.
Robert Moreno no ha programado ninguna sesión en el estadio para preparar el encuentro ante el Rayo Vallecano, con el fin de facilitar las labores de los operarios, y para cumplir ese plazo que exige LaLiga y para el que quedan más de dos semanas. Las bajadas de temperaturas de los últimos días también colaborarán para la recuperación del ‘tapete’ nazarí.
Más historias
El Granada CF se atasca en casa
Fran Escribá: «Si competimos bien somos un equipo muy difícil de ganar»
El Granada CF y la Subdelegación del Gobierno vuelven a unirse para la lucha contra la violencia sobre las mujeres