El Granada CF pasa de los 47 millones contabilizados en verano, a los más de 62 millones tras la ventana de fichajes invernal
La Liga de Fútbol Profesional ha publicado los límites salariales tras el mercado de invierno. El Granada CF, que ha realizado 18 operaciones durante esta ventana de incorporaciones, ha crecido en más de 15 millones de euros.
El cuadro nazarí cerró el mercado veraniego como el quinto equipo por la cola en lo que a límite salarial se refiere. No obstante, el mes de enero ha dejado muchos cambios en la plantilla, entre los que destaca la inesperada salida de Bryan Zaragoza dirección Bayern de Múnich. Además, el desembolso no ha sido grande, teniendo en cuenta que numerosas incorporaciones han llegado en calidad de cedidos. Así las cosas, el límite salarial para lo que resta de temporada es de 62,660 millones de euros.
Si a inicios de temporada el Granada CF ocupaba la quinta posición por la cola, actualmente milita en 12ª posición. Ha adelantado a equipos como Girona FC, Rayo Vallecano, RCD Mallorca o Cádiz CF.
Ojalá la economía implicara resultados. Pero en el fútbol el dinero no lo es todo. De hecho, atendiendo a esta tabla clasificatoria, el Granada CF salvaría la categoría de forma sobrada, pero la realidad es otra. El empate ante la UD Almería coloca a los pupilos de Alexander Medina a seis puntos de la salvación. Este fin de semana el cuadro nazarí recibe al Valencia CF, con la ilusión de conseguir tres puntos que le metan de lleno en la lucha por la permanencia.
En caso de triunfo rojiblanco se abren tres escenarios: victoria del Cádiz CF sobre el Celta (el Granada cerraría la jornada a tres puntos de la salvación); empate entre amarillos y celestes (el Granada quedaría a cuatro puntos de la salvación) o victoria del Celta en tierras gaditanas. En este último caso la distancia seguiría siendo de seis puntos.
Más historias
Fran Escribá: «Si competimos bien somos un equipo muy difícil de ganar»
Diputación impulsa la promoción turística de la provincia en las Islas Canarias
Diputación da respuesta a una demanda histórica de Albuñuelas